Carta de un lector de Almirante Brown:
Compré un pack de 4 cajas de leche marca La Suipachense en un reconocido supermercado de Burzaco, lo que equivale a un total de 48 cartones. Al abrir el primer cartón, y luego al revisar uno de cada pack, notamos algo inusual: al servir la leche, es necesario colarla ya que contiene una especie de cuajo o sustancia similar a “queso”, con abundantes partes sólidas en su interior. Incluso al hervirla, estas impurezas siguen apareciendo.
No está cortada ni agria, pero tiene un color amarillo poco habitual ademas de esa textura anormal que claramente no debería estar presente en una leche pasteurizada lista para consumir.
Ante la preocupación, llamé al número de atención al cliente que figura en el carton de leche y me atendió un muchacho que, según sus propias palabras, es el portero. Me aseguró que “el laboratorio me va a llamar”, pero hasta ahora nadie se comunicó. También envié un correo electrónico detallando la situación y enviando fotografias y lote y no recibí ninguna respuesta.
Me pregunto:
¿Por qué La Suipachense no responde a los reclamos de los consumidores?
¿Dónde está el control de calidad?
¿Y la responsabilidad hacia quienes confiamos en su producto?
Me parece importante compartir esta experiencia para que otros estén atentos. Ojalá alguien de la empresa tome nota y dé una explicación.
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